Materiales
• Un vaso con agua
• Sal marina o del Himalaya
• Una vela blanca o dorada
• Un cuarzo cristal o amatista (opcional)
• Aceite esencial de romero o lavanda
• Incienso de sándalo o palo santo
• Un espejo pequeño
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Paso a Paso
1. Purificación del Campo Energético
• En un recipiente con agua, disuelve una cucharada de sal.
• Sumerge tus manos y pásalas por tu rostro y cuello, visualizando cómo cualquier pesadez o energía negativa se disuelve.
• Si tienes incienso, pásalo alrededor de tu cuerpo en movimientos circulares, empezando por la cabeza y descendiendo.
2. Activación de la Fuerza Interna
• Siéntate en un lugar tranquilo con la espalda recta.
• Enciende la vela blanca o dorada, enfocando tu intención en atraer energía vital.
• Toma el cuarzo o simplemente frota tus manos con el aceite esencial.
3. Respiración Energética
• Cierra los ojos y respira profundamente por la nariz.
• Visualiza una luz dorada entrando por la coronilla con cada inhalación, recorriendo tu cuerpo hasta la planta de los pies.
• Con cada exhalación, suelta el cansancio o la energía densa.
• Haz esto por 7 ciclos de respiración.
4. Empoderamiento con el Espejo
• Mira tu reflejo en el espejo y repite en voz alta:
“Soy energía pura. Mi fuerza se multiplica. Todo mi ser brilla con vitalidad.”
• Sostén la mirada durante unos segundos y siente cómo tu energía se eleva.
5. Cierre y Anclaje
• Agradece a tu cuerpo y espíritu por su fortaleza.
• Bebe el vaso con agua lentamente, sellando la energía renovada en tu interior.
• Deja que la vela se consuma o apágala con gratitud.
Consejos Adicionales
• Haz este ritual en la mañana o antes de actividades importantes.
• Puedes acompañarlo con música de alta vibración o mantras.
• Si sientes un bloqueo fuerte, repítelo durante 3 días seguidos.
Este ritual es una combinación de técnicas de limpieza energética, respiración alquímica y reprogramación mental, generando una subida de energía auténtica y duradera.
